Según ha informado la agencia Europa Press, la sala segunda de lo Penal del Tribunal Supremo ha ratificado la condena dictada por la Audiencia de Alicante a tres agentes de la Policía Local de Aspe, y al propio ayuntamiento, por una falta de vejaciones injustas y otra de lesiones a una pareja gay de la localidad. De este modo, el alto tribunal ha rechazado el recurso de casación interpuesto por los condenados.
La Audiencia Provincial condenó a uno de los agentes a ocho meses de prisión por un delito de lesiones. Además, los tres agentes de la Policía Local fueron condenados al pago de 90€ por una falta de vejaciones, y a 240€ por una falta de lesiones. También se impuso una indemnización de 270€ para el detenido en concepto de indemnización, mientras que su pareja debe ser indemnizada en 2.200€ por el agente condenado a prisión por el delito de lesiones.
Los hechos se remontan a la madrugada del 30 de septiembre de 2008 cuando los agentes condenados acudieron a solucionar una discusión por parte de la pareja. Uno de los implicados se identificó, pero el otro rehusó hacerlo e intentó abandonar el lugar de los hechos. Uno de los agentes lo agarró del brazo y el hombre en un “aspaviento” golpeó en la cara al agente. Los otros dos agentes lo redujeron, “lo derribaron” y “lo golpearon reiteradamente”.
Ante los gritos del hombre, su pareja intentó intervenir y el tercer agente lo inmovilizó contra una pared “con el brazo retorcido” y la cabeza contra la tapia. Como resultado, el hombre sufrió la fractura de un dedo. A su pareja, los otros dos agentes le profirieron frases como “moro” y “maricón de mierda”.
Tras estos acontecimientos, al detenido lo trasladaron hasta el Centro de Salud en “calzoncillos” y posteriormente lo llevaron a las dependencias de la Guardia Civil. Allí, un agente de la benemérita recriminó la actuación de los policías.
El detenido sufrió «policontusiones con hematomas, erosiones y escoriaciones múltiples en cuero cabelludo, ambos hombros, brazos, rodilla, herida superficial en el quinto dedo de mano derecha y tobillos», unas heridas que precisaron una única asistencia inicial.
Tras la sentencia de la Audiencia de Alicante, los agentes y el ayuntamiento interpusieron un recurso de casación que el Tribunal Supremo rechazó el pasado 25 de noviembre ya que “la sentencia detalla la prueba tenida en cuenta en cada uno de los episodios que conforman el todo de lo sucedido y que denota la gravedad del comportamiento policial”.
