La Policía Local de Novelda ha informado de los casos que se vienen detectando de intentos de determinados tipos de hurto y estafas basados en vencer la desconfianza del ciudadano y su proximidad mediante el método denominado del “abrazo”.
Según los datos de que dispone la Policía, los autores de estos hechos son hombres y mujeres de 24 a 50 años, procedentes de países del este de Europa. Siempre actúan con habilidad consiguiendo que el robo pase desapercibido por parte de la víctima, sobre todo en los primeros momentos, hasta que abandonan el lugar.
Las víctimas, por lo general, son personas mayores de ambos sexos, especialmente vulnerables, por razón de edad, condición física o por otros factores, que les dificultan para detectar o impedir con la suficiente antelación que van a ser víctimas de algún hecho delictivo. Suelen actuar cuando las víctimas pasean solas por la calle portandode forma visible joyas de oro tales como cadenas, pulseras, colgantes o anillos.
El «modus operandi» de este tipo de delincuentes cambia en función del momento, pero el final siempre es el mismo: la búsqueda del contacto físico con la víctima mediante un falso abrazo, besos o caricias, para sustraerle con habilidad las joyas que pueda llevar.
La Policía señala que suelen actuar en grupos de dos o cuatro personas, siempre de ambos sexos, normalmente por la mañana, abordando a las personas mayores que caminan solas por la vía pública para preguntarles por farmacias o centros de salud. Sin embargo, cuando se percatan que la víctima porta algún tipo de joya, optan por darle un abrazo, o bien intentan colocarle en el cuello o muñeca baratijas de color dorado, momento en el que aprovechan para sustraer las joyas auténticas.
También es frecuente solicitarles firmas y ayuda económica, para colaborar en falsa construcción de centros para personas sordomudas o con alguna discapacidad. Si la víctima accede, se lo agradecen efusivamente con besos y abrazos, consiguiendo con ello sustraerle cartera o las joyas que porta.
En el caso que la víctima no firme, ni aporte ayuda alguna para la falsa causa, es abrazada igualmente, aludiendo por ejemplo, al parecido físico con un familiar del delincuente o cualquier otra excusa.
Los hombres mayores suelen ser abordados por mujeres que les preguntan por algún lugar de interés como iglesias, monumentos o sitios turísticos. Una vez les facilitan la información comienzan los abrazos, besos, esta actitud genera confusión en la víctima que no se percata que la están robando.
Por ello, la Policía Local ha destacado la necesidad de informar de este tipo de hechos, y alertar para que desconfíen de las personas que muestren un repentino interés hacia ellos con la intención de embaucarlos o aislarlos del lugar en el que se encuentran.
También se solicita colaboración, para que cuando observen este tipo de hechos en la vía pública, no duden en comunicarlo a la Policía Local o Guardia Civil, que de manera inmediata se desplazarán al lugar para su comprobación.
-
-
-
-
