Evitar agravios comparativos entre los vecinos que viven en el casco urbano y los que lo hacen en el extrarradio es lo que persigue la nueva tasa por el servicio de recogida de residuos sólidos urbanos que SUMA ha puesto al cobro estos días y que ha registrado un incremento para los habitantes de zonas rurales de 26,30 euros a 65€, la misma cantidad que abonan los residentes del casco urbano por igual servicio.
Con este incremento el gobierno municipal pretende acabar con la paradoja que suponía que, por el mismo servicio de recogida de basura en contenedores, los vecinos del casco urbano abonaran una tasa superior en más del 240 por ciento a la que pagaban los residentes en el extrarradio. Para conseguir igualar los importes la tasa de basura no se incrementó la media del nueve por cien que subieron el resto de tasas a las 11.070 viviendas urbanas, sino que bajó en un euro, mientras que sí ha subido hasta los 65 euros a las 1.262 viviendas ubicadas en zonas rurales.
Tras esta modificación en la tasa la recogida de residuos sólidos urbanos en extrarradio aportará 82.030 euros, lo que supone el 34,65% del coste del servicio en la zona (236.708,39€), mientras que los habitantes del casco urbano contribuirán con 719.550 euros, lo que representa el 86 por ciento de los 833.291,61€ del gasto en que se cuantifica, cantidades todavía alejadas del 1.070.000 del coste total del servicio de recogida de residuos sólidos urbanos y del tratamiento de los mismos.
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