El pleno del Ayuntamiento aprobará, en la sesión plenaria de la próxima semana, la propuesta del área económica que modifica las bonificaciones en la Tasa de Recogida de Residuos Urbanos (basura) e incrementa el Impuesto de Plusvalía. Ricardo Moreno, concejal de Servicios Económicos, ha destacado como principal novedad en la tasa de recogida de residuos urbanos la bonificación del 50% a personas mayores de 65 años, pensionistas y sin cónyuge, cuando sus ingresos no superen la pensión mínima, de forma que pasarán a pagar la mitad siempre y cuando sean propietarios del inmueble. Se trata, según Moreno, de “aplicar una medida progresista que haga que paguen menos los que menos tienen, aplicando, de esta forma, el principio redistributivo de la riqueza”. En este caso los interesados deberán solicitarlo en la oficina de SUMA y la bonificación entrará en vigor en 2018.
Además la ordenanza fiscal que regula la tasa de recogida de residuos sólidos contempla también la desaparición de la misma para locales vacíos e introduce el concepto de Consulta de Profesionales Sanitarios, hasta ahora englobados en el cuadro de Clínicas. En este caso dentistas, médicos, enfermeros, psicólogos, podólogos o fisioterapeutas pasarán a pagar 97 euros, frente a los 288€ que venían abonando hasta ahora. Según el responsable económico del equipo de gobierno el incremento de las bonificaciones ha sido posible “gracias a la gestión eficaz de la anterior concejala de Hacienda, Cari Crespo, que detectó más de cien mil euros de impagos por parte de casi 600 comercios e industrias que no se habían dado de alta desde 2010, de modo que, una vez regularizada la situación se han incrementado los ingresos municipales y ello nos permite aplicar bonificaciones más justas”. Finalmente la ordenanza también contempla una nueva tarifa por la retirada de escombros de la vía pública y por limpieza de solares causados por particulares y empresas. En este caso si se realiza por parte de personal municipal y se utilizan vehículos del Ayuntamiento, se establece una tasa de 68 euros por desplazamiento y 60-80€ por retirada y eliminación.
La modificación de las ordenanzas fiscales también afecta al Impuesto de Incremento del Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana, conocido como Plusvalía, que se aplica a las propiedades como consecuencia de su transmisión, ya sea por herencia o compra venta, con el doble objetivo, según Moreno, de “gravar la especulación inmobiliaria a corto plazo y favorecer a las personas con menos recursos”. En este caso la Plusvalía sufrirá un incremento al aumentar el porcentaje que se aplica “para situarlo en la media de los municipios de nuestro entorno” y modificarse la cuota de transmisión de viviendas por periodos de uno a cinco años. Aun así este impuesto también contempla bonificaciones del 50% si se cuenta con una pensión mínima o el salario mínimo interprofesional, igual porcentaje en caso de que el adquiriente se encuentre en paro y un 25 por ciento adicional si la propiedad tiene hipoteca.
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