La Guardia Civil de Alicante ha desarticulado un clan familiar, de origen rumano, cuyos miembros se dedicaban presuntamente al robo de productos frutales, en su mayoría del campo de Orito, pedanía de Monforte del Cid. Según la guardia Civil, han llegado a sustraer más de 4.500 kgs de uva de mesa de viñedos de la comarca y, en el momento de su detención, circulaban con una furgoneta cargada con 900 kgs de este mismo producto, que había sido robado esa misma madrugada. Los detenidos, residentes en Elche, ya han pasado a disposición judicial, quedando todos ellos en libertad provisional con cargos.
La investigación se inició el pasado mes de julio, con motivo de una serie de hurtos reiterados, en diferentes viñedos de la pedanía de Orito, de la localidad de Monforte del Cid, de los que se sustrajeron diversas cantidades de uva de mesa, tanto de la variedad “victoria” como de “red globe”. Los agentes del Equipo ROCA de la Guardia Civil de Ibi realizaron un estudio delincuencial pormenorizado basado, tanto en las diversas denuncias presentadas por los perjudicados de estos hurtos agrícolas como en los innumerables contactos y entrevistas realizadas a agricultores de la zona, llegando a establecer un patrón común de conducta. El modus operandi consistía en que varios autores sustraían la uva de un viñedo, previamente seleccionado, al que accedían a través de las vallas de protección del perímetro o bien, a través de caminos, cuyo paso estaba cortado por cadenas, y la cargaban en un vehículo, tipo furgoneta, mientras uno de ellos realizaba labores de vigilancia y avisaba en caso de ser vistos.
Con toda esta información, se estableció un intenso operativo de vigilancia en la zona afectada, compuesto por agentes de paisano del Equipo ROCA de Ibi y por agentes de la Guardia Civil de Novelda, apoyados por efectivos de la Policía Local de Monforte del Cid. Como resultado, se logró identificar la tarde del pasado 6 de agosto, una furgoneta que circulaba por los caminos de los viñedos afectados, ocupada por cuatro personas de nacionalidad rumana, residentes en la localidad de Elche, quienes suscitaron las sospechas de los agentes, ya que portaban 40 capazos de plástico, vacíos, y sus versiones del motivo por el que se encontraban en el lugar eran contradictorias. A esto se suma, además, los antecedentes que alguno de ellos tenían por la comisión de otros delitos, también de sustracción de fruta, por lo que la investigación se centró en estas personas.
Durante dos tardes-noches consecutivas, agentes del Equipo ROCA realizaron una vigilancia discreta sobre el domicilio de los sospechosos y sobre la furgoneta vista en el terreno. El resultado fue inmediato, ya que, durante la madrugada del día 8, se volvió a interceptar la misma furgoneta investigada, en los mismos viñedos, a las 6 de la mañana, la cual iba cargada, según la Guardia Civil, con 900 kg de uva de mesa y ocupada por las mismas cuatro personas. Tras numerosas gestiones, se consiguió determinar que esa uva procedía de un delito de robo y otro de hurto de dos viñedos diferentes, los cuales habían sido asaltados durante esa misma madrugada, por lo que, tras localizar a los dueños de los terrenos, se les hizo entrega de su fruta, valorada en más de 1.000 euros.
Los detenidos son dos hombres, ambos de 29 años y dos mujeres, de 37 y 41 años, todos ellos rumanos y vecinos de Elche, a los que se les imputa un total de 2 delitos de robo con fuerza y otros 8 delitos de hurto, sustrayendo más de 4.500 kgs de uva de mesa, valorada en unos 5.000 euros. Ya han pasado a disposición judicial, quedando todos ellos en libertad provisional con cargos. Con estas detenciones se ha logrado desactivar un activo clan, todos miembros de una misma familia, dedicada presuntamente al robo de frutales, hecho que ya estaba comenzando a generar una palpable alarma social entre dicho colectivo agrario, en concreto en el de la uva de mesa.