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La concejalía de Fiestas ha hecho balance de los actos organizados por el Ayuntamiento de Petrer con motivo de las Fiestas Patronales en honor a la Virgen del Remedio. Unas actividades que, en su conjunto, han hecho que la participación ronde las doce mil personas en total.
La concejala del área, Ana Tortosa, ha señalado que “estamos muy satisfechos de la participación y habrían sido muchos más pero hay que tener en cuenta que los eventos han tenido todos aforo y reserva previa con lo que la participación estaba acotada”.
Así, las actividades entorno a las celebraciones patronales comenzaron con el Mercado de Circo, en la plaza dura del Mercado de la Frontera, en la que se congregó durante el fin de semana a cerca de 3.000 personas en los diferentes días de celebración. Hay que tener en cuenta que el aforo máximo era de 1.500 personas pero la amplitud de horarios facilitó que se evitaran aglomeraciones y que hubiera bastante accesibilidad a la hora de la entrada al mismo.
En las actuaciones musicales celebradas en el parque 9 d’Octubre y en el parque del Campet se superaron las 5.000 personas, en espectáculos todos ellos con aforos controlados como la actuación de la cantante Gisela, que agotó las entradas a los pocos minutos de ponerse su reserva por internet; el musical Mamma Mía Vienna, la actuación de grupos locales como Safari en Botsuana, Rockanrolla y los Hermanos Navarro, organizadas de la mano de Kaskaruja para la tarde-noche del viernes, o el concierto de Stage-40 Principales de la concejalía de Juventud que tuvo como plato fuerte al grupo Bombai y que también agotó rápidamente los asientos disponibles nada más salir la reserva.
A todo ello hay que sumar las actividades organizadas para los más pequeños como el espectáculo «Pinturilla y la Pandilla Vainilla», los juegos tradicionales, los Nanos i Gegants o la mascletá percutida de la Cola El terrós. Por último, el pregón de fiestas leído en esta ocasión por el empresario Luis Chico se celebró por primera vez con una zona acotada de sillas de la plaza de Baix, aunque hubo gente de pie alrededor, estimándose un afluencia de unas 500 personas.
La edil ha dicho estar «satisfecha» de estas fiestas en las que «hemos recuperado a medio gas lo que es el programa de actividades» debido a las restricciones de la pandemia y las necesarias medidas de seguridad.
Y ha destacado la ausencia de incidentes dignos de reseñar durante estos días. Tortosa ha agradecido el trabajo y colaboración de funcionarios municipales y de los colectivos que han tomado parte, y
espera que el año que viene se incorpore las fiestas en los barrios si la situación termina por normalizarse por completo y se dan las condiciones necesarias.
El ciclo de actos se ha cerrado este pasado fin de semana con un evento entorno a las Carasses y fiestas similares de la provincia de Alicante que, a juicio de la edil, ha sido el «broche de oro perfecto» a estas celebraciones y que se ha organizado conjuntamente con la concejalía de Cultura y el Museo Dámaso Navarro.