El pleno correspondiente al mes de octubre en el Ayuntamiento de Aspe fue intenso. En él, además de los puntos del orden del día, el PP aspense presentó una moción para la reprobación del concejal Iván Escobar por las supuestas irregularidades en su proceso de contratación en el Ayuntamiento de Elda.
El resultado de la moción fue la siguiente: 9 votos en contra, 8 de Izquierda Unida y 1 de Ciudadanos; y 9 a favor, 6 del Partido Popular y 3 del Partido Socialista. La abstención la protagonizó el concejal socialista Manolo García.
9 a 9, por lo que desempate lo dirimió el voto de calidad del alcalde que finalmente decantó la balanza a favor de Escobar.
Fue un pleno tenso, largo en extensión, participaciones y argumentos.
El Partido Popular, quien presentaba la moción, la consideraba necesaria y justificada. Su portavoz, Sergio Puerto, argumentaba que “lo triste de todo esto es que tanto el señor Escobar como el alcalde, han tenido varias ocasiones para evitar llegar a este punto, pero lamentablemente han desaprovechado todas y cada una de ellas. Es más, lo único que han conseguido con su actitud es que tanto nuestra petición de dimisión como esta reprobación estén mucho más que justificadas”.
Ciudadanos, en palabras de Palmira Escobar, votaba en contra al considerar que “ya que se ha dado traslado de los hechos al Ministerio Fiscal para su consideración, por si fueran susceptibles de ilícito o no, lo que nuestro partido considera es que lo propio es que se pronuncie la Justicia”.
El PSOE sí secundo la moción del PP. Su portavoz en este pleno, José Luis Martínez, dijo que no iban a entrar en consideraciones hasta que no lo dirima la justicia, aunque calificaba el episodio Escobar como “poco ético y que hace un flaco favor a la corporación y al Ayuntamiento de Aspe. Quizá ahora no es el momento del minuto de gloria, sino del minuto de dar la cara, de hacer frente a la realidad y dar las explicaciones que haya que dar”.
José Vicente Pérez, como portavoz de IU, cargó las tintas llamando ruin a Sergio Puerto calificándolo como “una persona falsa, que conociendo los datos los ha falseado, porque cuando uno dice medias verdades, no dice todo lo que sabe y le han transmitido privada y públicamente, es una persona ruin, una persona falsa” y califica esta situación de “una farsa, una mentira. Es un intento de una caza de brujas a una persona que está cumpliendo escrupulosamente con su trabajo”
El interpelado, Iván Escobar, no hizo declaraciones aconsejado por sus abogados aunque reconoce “estoy deseando más que nadie en este mundo que si esto tiene que llegar a juicio lo haga lo antes posible para poder limpiar mi persona y mi nombre”.
