El dramaturgo aspense Antonio Cremades vuelve a tender un puente entre la literatura y la emoción con El intruso, su nueva obra publicada por La Máquina de Nubes. A pesar de su extensa trayectoria —más de medio centenar de textos teatrales y algunos de los premios más importantes de la dramaturgia española—, Cremades mantiene una mirada humilde y un pulso creativo que sigue interrogando a los lectores desde lugares íntimos y silenciosos.
Charlando con el autor sobre esta obra, no oculta la situación delicada por la que atraviesa el género. «La dramaturgia, desgraciadamente, está un poco olvidada», lamenta, consciente de que «si a la gente no le acostumbras a leerla, la arrinconas». Aun así, defiende que el teatro sigue siendo literatura, un espacio donde lectores y personajes respiran al mismo compás, donde el escenario se construye en la mente y no entre bambalinas.
Leer teatro: entrar en una habitación que aún no existe
Lejos de quienes creen que el teatro es difícil de leer, Cremades insiste en que solo falta atreverse a dar el primer paso. «Lo peor no es que no sepas leer teatro, es que no te has adentrado a leer teatro», señala. Para él, la dramaturgia es una invitación a mirar más de
cerca: «En el teatro te haces tu composición de lugar».
Sus textos, marcados por silencios, insinuaciones y una aparente sencillez, buscan capturar lo que no siempre se dice en voz alta: la incomunicación, la espera, la imposibilidad de escapar de uno mismo.
Una trayectoria grande en premios y discreta en voz
Pese a reconocerse «bastante vergonzoso» e incómodo en las entrevistas, Cremades acumula más de 70 obras entre piezas breves y textos largos, de los cuales una quincena ha llegado a los escenarios.
En su catálogo conviven títulos como Topos, Después de la señal, Huellas en la piel, Estrecho, La mina de sal o Mapa de ausencias, y su trabajo ha sido reconocido con galardones como el Calderón de la Barca, el Buero Vallejo o el Domingo Pérez Minik, entre otros. Muchas de sus obras han viajado también a otros idiomas: italiano, portugués, catalán o griego.
El intruso: cuando la culpa abre la puerta
Su nueva obra, El intruso, se adentra en el territorio emocional de un matrimonio asediado por las consecuencias de un acto cometido por el marido. «La historia va sobre la culpa, sobre el miedo…», resume Cremades, sin desvelar más.
Se trata de un thriller psicológico donde cada gesto y cada pausa pesan tanto como las palabras: «Lleva un ritmo muy especial», afirma. Esta vez, asegura, no ha querido dejar huellas personales en la trama: «En esta obra no he querido poner nada mío, más allá del trabajo». Un trabajo que describe como particularmente minucioso en la construcción interna de los personajes.
Próximas citas en Aspe
La obra será comentada por el Club de Lectura de Aspe el 15 de diciembre, y el autor prevé una presentación oficial en la localidad a finales de enero, probablemente el viernes 23, a falta de confirmación
Esta es la entrevista que mantuvimos con Antonio Cremades a propósito de la presentación de su nuevo libro.
