El Pleno del Ayuntamiento de Aspe ha aprobado el Presupuesto Municipal para 2026, unas cuentas que contemplan un importante incremento de las inversiones, que pasan de 22,4 a 26,75 millones de euros, lo que supone un aumento del 20 % respecto al ejercicio anterior.
Este crecimiento presupuestario se lleva a cabo sin aumentar la presión fiscal, ya que el Ayuntamiento de Aspe mantiene congelados impuestos y tasas. La mejora se apoya principalmente en el incremento de las transferencias procedentes de otras administraciones públicas, como Diputación, Generalitat Valenciana y Gobierno de España, a través de subvenciones y aportaciones.
El presupuesto aprobado refuerza de manera destacada las áreas que inciden directamente en el bienestar de la ciudadanía. Sobresale el incremento del 100 % en las partidas destinadas a vivienda, que pasan de 1,8 a 3,6 millones de euros. También se registran aumentos relevantes en seguridad y movilidad (+34 %), servicios sociales (+27 %), fomento del empleo (+9 %) y sanidad (+8 %).
En el capítulo de inversiones, el presupuesto incluye la finalización de la rehabilitación del Centro de Emergencias Municipales, en la calle Lepanto, con una dotación de 740.000 euros; el inicio de las actuaciones del Centro de Día de Mayores, dentro del Plan Covivint, con 720.000 euros; la adecuación del edificio de la avenida de Elche para viviendas sociales, con una inversión de 1,6 millones de euros; y las actuaciones del programa Barris, que prevén mejoras en la calle Azorín (1,15 millones de euros), calle Santander (820.000 euros) y la calle Kennedy (12.000 euros).
En cuanto a los ingresos, el presupuesto refleja un notable aumento de las transferencias corrientes, que alcanzan los 9,5 millones de euros, y de las transferencias de capital, con 2,7 millones de euros, lo que supone cerca de la mitad del presupuesto municipal. Destaca también el incremento del 8 % en la Participación en los Ingresos del Estado (PIE), que en 2026 se situará en 7,4 millones de euros.
El aumento global del presupuesto viene motivado fundamentalmente por el crecimiento de las subvenciones y de la participación en los tributos del Estado. Las cuentas se han elaborado conforme al principio de caja y mantienen las líneas estratégicas de ejercicios anteriores: contención del gasto corriente, equilibrio presupuestario y garantía de ejecución.
La previsión de ingresos se ha realizado de forma realista, prudente y responsable, tomando como referencia la liquidación estimada de 2025 y teniendo en cuenta la bajada de impuestos y tasas. En el apartado de gastos, se ha priorizado el mantenimiento de los servicios públicos esenciales, el apoyo a la actividad económica y las políticas dirigidas a los colectivos más vulnerables.
En este sentido, el capítulo II de Gastos en Bienes Corrientes y Servicios se reduce un 5,12 %, fruto del esfuerzo municipal por la contención del gasto. El presupuesto contempla además una inversión social superior a los 4 millones de euros, más de 92.700 euros destinados a empleo y alrededor de 230.000 euros en promoción económica.
Se trata de un presupuesto que incrementa el gasto social y las ayudas a empresas, mantiene congelados impuestos y tasas y evita la aplicación del denominado “tasazo de la basura”, que sí se implantará en otros municipios. Unas cuentas 100 % sostenibles, sin recurrir a operaciones de crédito, que mantienen al Ayuntamiento de Aspe con deuda cero y garantizan la estabilidad financiera municipal.
En este contexto, el alcalde de Aspe, Antonio Puerto, ha señalado que “aunque en el último debate presupuestario algunos grupos hayan votado en contra, desde el equipo de gobierno vamos a seguir tendiendo la mano, escuchando y trabajando con todos para mejorar la vida de los vecinos y vecinas de Aspe, como ya hicimos en el presupuesto de 2025, en el que se incluyeron más de 60 propuestas de la oposición”.
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