Agentes de la Policía Nacional han desarticulado un grupo criminal dedicado a la producción a gran escala de marihuana, deteniendo a sus nueve componentes, uno de ellos menor de edad, como presuntos responsables de los delitos de tráfico de drogas, defraudación de fluido eléctrico y pertenencia a grupo criminal. Durante la operación se ha conseguido desmantelar un total de 8 cultivos hidropónicos repartidos por distintas localidades de la provincia, cinco de ellos en Elda y tres más en las localidades de Petrer, Novelda y Aspe, incautándose un total de 2.270 plantas de marihuana.
Hasta 14 emplazamientos utilizados por la organización
La investigación, a cargo del Grupo 1º de Crimen Organizado de la UDYCO de Alicante, tuvo su origen tras tenerse conocimiento de la posibilidad de la existencia de un entramado criminal asentado en la provincia, que se estaría dedicando a la producción masiva de marihuana en cultivos hidropónicos instalados en inmuebles modificados para tal fin, para su posterior transporte hacia otras zonas.
Avanzada la investigación, se llegó a determinar que, la supuesta organización delictiva estaría compuesta por al menos nueve miembros, y contaría con una amplia y sólida infraestructura para la instalación de cultivos hidropónicos de marihuana, disponiendo de otros lugares para el procesamiento de la sustancia y almacenaje, detectándose en total catorce emplazamientos ubicados en distintas localidades de la provincia como Elda, Petrer, Novelda y Aspe.
Además, contarían con lugares específicamente destinados al almacenamiento de forma segura de la sustancia estupefaciente ya procesada en cogollos y dispuesta para su venta o distribución, lo que se conoce en el argot policial como “guardería” de la droga.
Nueve implicados y fuertes medidas de contra vigilancia
En cuanto a los miembros del entramado, la investigación reveló que estaría perfectamente estructurado en niveles de responsabilidad, siendo los tres principales investigados, los encargados de adquirir útiles para el cultivo de marihuana, como fertilizantes, químicos, germinadores de semillas o esquejes, previamente adquiridos por ellos en establecimientos denominados GROW SHOP de venta exclusiva de productos para el cultivo de marihuana.
Toda esta infraestructura logística, estaría siendo abastecida de energía a través de la manipulación de contadores eléctricos y otros tipos de defraudación de fluido eléctrico, con la consiguiente peligrosidad que supone para los vecinos de la zona el conglomerado eléctrico necesario para que funcionen plantaciones de estas magnitudes.
En cuanto al modo de operar de los implicados, cabe destacar las medidas de contra vigilancia que utilizaban a la hora de desplazarse en vehículo de un lugar a otro. Disponían siempre un vehículo como lanzadera y otros como transporte, con el fin de dotar de mayor seguridad el desplazamiento de la droga y su entrega al cliente, la cual se llevaba a cabo normalmente en una zona aislada.
Ocho registros en diferentes localidades
Con todos estos indicios, se llevó a cabo la explotación de la operación, practicándose ocho entradas y registros; cinco en Elda, uno en Petrer, uno en Novelda y uno en Aspe.
El cómputo de la operación se saldó con la detención de los nueve investigados, uno de ellos menor de edad, y la incautación de 2.270 plantas de marihuana en total en distintas fases de crecimiento y floración, además de cogollos y picadura de la misma, así como de 1.800 euros en efectivo.
Salas especiales con plantas tipo madre
Las detenciones y los registros efectuados, pusieron de manifiesto el gran potencial de producción que tenía la organización y la compleja distribución de las plantaciones desmanteladas.
Utilizaban uno de los emplazamientos como “centro de producción de esquejes”, seleccionando así las de mayor calidad en una sala especial, donde se hallaron 25 plantas tipo madre bajo luz directa proporcionada por lámparas de alta intensidad lumínica y aparatos de extracción de aire.
Tal era el proceso de producción por parte del entramado, que se estimó que estos cultivos hidropónicos de gran potencial, bajo un clima artificial óptimo para el crecimiento y floración podrían estar produciendo entre 50-100 kilogramos de cogollos de marihuana cada 2-3 meses.
Concluían los investigadores, que los beneficios obtenidos, eran reinvertidos para el crecimiento del ilícito negocio, buscando nuevos emplazamientos para la instalación de otros cultivos, dotándolos de aparataje eléctricos y otros dispositivos necesarios que podrían alcanzar un valor próximo a los 100.000 euros.
Los cuatro principales detenidos, tras la práctica de las diligencias policiales, fueron puestos a disposición del juzgado de instrucción de guardia de la localidad de Elda, siendo informada también la Fiscalía de Menores de Alicante de las actuaciones, dada la minoría de edad de uno de los arrestados.