#Novelda: Campaña contra el vertido de toallitas al alcantarillado
Ocho toneladas de toallitas generan problemas económicos, de salud y medioambientales
El Ayuntamiento de Novelda, a través de la concejalía de Ciclo Hídrico, inicia, junto a la empresa concesionaria del servicio de agua potable y saneamiento de Novelda, Aqualia, una campaña de concienciación sobre el vertido de toallitas desechable al alcantarillado.
El regidor de Ciclo Hídrico, Iván Ñíguez, ha alertado a la población de la gravedad de un problema que “causa un grave perjuicio al Ayuntamiento en su momento a día” puesto que, ha asegurado, “el mal uso del saneamiento provoca filtraciones y retenciones y, en consecuencia, malos olores en zonas del alcantarillado”.
Ñíguez ha señalado que Novelda recogida dos contenedores mensuales, un total de ocho toneladas de toallitas del alcantarillado, “más las que llegan a la depuradora, lo cual supone un problema económico, de salud y de medio ambiente”, por lo cual apela a la responsabilidad ciudadana para un uso correcto del saneamiento y recuerda que las toallitas desechables tienen que depositarse en papeleras “porque el váter no es una cloaca a la cual echar todo”.
¿Tú tiras toallitas húmedas al WC?
Con esta pregunta directa al ciudadano la campaña pretende concienciar a la población de la responsabilidad personal de los usuarios para la resolución del problema puesto que, según ha apuntado Joaquín Pastor, jefe de servicio de Aqualia en Novelda, “la solución empieza en un mismo y en su propia casa, concienciando a su entorno más próximo”.
La acumulación de toallitas húmedas en las redes de alcantarillado provoca, entre otros, atascos interiores en desagües de viviendas, filtración de aguas al subsuelo, acumulación de gases y olores “e incluso hundimientos en las calles”, advierte Pastor, quien ha explicado que “las toallitas abocadas al alcantarillado se mezclan con óleos y jabones y forman una masa sólida que obstruye las cañerías”.
El responsable de Aqualia ha apelado a la sensibilización ciudadana para corregir una conducta que “repercute negativamente en el servicio de saneamiento, puesto que se destinan recursos que podrían optimizarse en otras incidencias”.
