En un informe fechado el 12 de abril, el Consell Jurídic Consultiu de la Comunitat Valenciana ha concluido que el contrato del Ayuntamiento de Pinoso con la mercantil que presta el servicio de recogida de residuos sólidos urbanos y limpieza viaria en Pinoso desde 1997, SAPESA S.L., finaliza el próximo 31 de mayo. De este modo, el órgano consultivo resuelve el procedimiento iniciado por el consistorio en noviembre del año pasado, zanjando así la discrepancia existente entre ayuntamiento y contratista sobre la fecha de finalización de la gestión de este servicio público.
En consonancia con el mencionado informe, el consistorio llevará al pleno extraordinario declarar la finalización del contrato en la fecha establecida por el Consell Jurídic Consultiu y comunicarlo a la empresa. Asimismo, se le requerirá para la continuidad en la prestación del servicio hasta entonces, o bien, hasta que se lleve a cabo la nueva adjudicación o se inicie la gestión directa por parte del ayuntamiento. El consistorio promovió, a principios del año pasado, la revisión de oficio del acuerdo plenario que dio lugar a una ampliación contractual del contrato suscrito con la mercantil en 1997, al considerar que no obedecía al interés general por no quedar suficientemente acreditadas las necesidades o causas argumentadas para tal ampliación. En este caso, el Consell Jurídic Consultiu determinó la improcedencia de declarar nulo aquel acto administrativo, aunque sí se pronunció sobre la fecha prevista para terminar el contrato, la misma que ha establecido en su último pronunciamiento. “El Consell ha dado la razón al ayuntamiento sobre la fecha estipulada para que concluya el contrato con la concesionaria del servicio, esto es, el próximo mes de mayo y no en 2020 como sostenía la empresa”, comenta el alcalde de Pinoso, Lázaro Azorín. “Como siempre ha mantenido la responsable del área, Silvia Verdú, los 15 años de duración del contrato no comienzan a contar desde 2005, fecha prevista para la finalización del contrato anterior, sino desde 2002, fecha en que se firmó la ampliación del contrato con un nuevo objeto, tal y como se extrae del informe del Consell”, asegura Azorín.
En este sentido, el órgano consultivo en su informe puntualiza que la ampliación contractual que se pactó en 2002 suponía elevar la duración del contrato “muy por encima de la previsión que constaba inicialmente en el procedimiento de selección del contratista”. De modo que, “se consiguió, por una vía indirecta, sustraerse de una nueva licitación y, con ello, a los principios generales en la contratación: libertad de acceso a las licitaciones, publicidad y transparencia de los procedimientos, y no discriminación e igualdad de trato entre los candidatos, que son la columna vertebrar de la contratación pública”. El primer edil avanza que el próximo paso ahora es estudiar la gestión más conveniente que se ajuste a las necesidades actuales del servicio en el municipio. “Una vez resuelta esta cuestión de manera satisfactoria para el ayuntamiento, hemos de realizar un estudio y valorar cuál es la mejor opción para continuar prestando el servicio de recogida de residuos sólidos urbanos, puesto que el de limpieza viaria está previsto que se municipalice, tal y como ya hemos hecho en parques y jardines”, concluye el alcalde.
